Pues si el sujeto no siempre es quien realiza la acción, porque muchas veces los verbos no expresan acciones, ¿Cómo reconocemos el sujeto? Recuerda que quien manda es el verbo: el sujeto tiene que estar en su mismo número y en su misma persona. Es decir, el sujeto ha de concordar con el verbo:
- (Nosotros) Llegaremos tarde.
- Tú no me escuchas.
- Han llegado las lluvias.
- La tormenta ha destruido las cosechas.
En consecuencia, el modo más seguro de identificar el sujeto es el siguiente:
- cambiar el número y/o la persona del verbo,
- observar que palabra (o grupo de palabras) ha de cambiar de número y/o persona).
Ejemplo:
a. Me falta un peso para el boleto del tren.
b. *Me faltan un peso para el boleto del tren.(No concuerda)
c. Me faltan varios pesos para el boleto del tren.
El sujeto es "un peso" y "varios pesos", porque tienen que cambiar de número si lo hace el verbo.