El acceso al agua es un Derecho Humano y, como tal, es universal, indivisible e interdependiente (está relacionado con otros derechos humanos).
El Derecho al acceso al agua potable está unido al derecho al saneamiento. No se puede tener agua potable sin saneamiento que evite su contaminación.
Este derecho es fundamental para la realización de otros Derechos Humanos que, de lo contrario, estarían en peligro.
Solamente podemos ejercer nuestros derechos si los conocemos.