¿Qué son?
- El género épico. Según Aristóteles, refiere a la palabra narrada. En su origen, fue un género literario en el que el autor presentaba hechos legendarios, generalmente haciéndolos pasar por verdaderos o basados en la verdad. Su forma de expresión habitual es la narración, aunque pueden entremezclarse también la descripción y el diálogo.
Este género fue luego asimilado por la narrativa y pasó a formar parte de esta. La narración consiste en contar una secuencia de acciones, realizadas por unos personajes, en un espacio y un intervalo de tiempo determinados. Tanto las acciones, como los personajes y el lugar, pueden ser reales o imaginarios.
Las máscaras del teatro representan a Talía y Melpómene, musas griegas de la comedia y la tragedia, respectivamente
- El género dramático. Según Aristóteles, es la palabra representada. Los textos dramáticos están destinados a ser escenificados, en forma de tragedia o de comedia. Interpretan algún episodio o conflicto de la vida de los seres humanos. Sus rasgos más característicos son el uso del diálogo y la ausencia de la figura del narrador.
La diferenciación entre drama y teatro que señalan los teóricos consiste en que el primero es la versión constituida por elementos lingüísticos en su totalidad, mientras que el teatro es la concreción del drama e incluye la actuación, la música y los elementos escenográficos.
- El género lírico. Según Aristóteles, la palabra cantada. Recibe su nombre del instrumento musical con el que los antiguos griegos acompañaban los cantos: la lira. Son textos a través de los cuales el autor transmite sentimientos, emociones o sensaciones respecto a una persona u objeto de inspiración. La expresión habitual de este género es el poema. Aunque mayoritariamente están escritos en verso, también existen textos líricos escritos en prosa (prosa poética).
- De esta clasificación inicial han derivado diferentes modelos y propuestas, hasta incluir en la clasificación moderna el género didáctico, cuyo objetivo principal es transmitir algún conocimiento. Este género no se centra en cómo se narra, sino en la enseñanza que implica lo narrado. Su expresión más representativa es el ensayo.