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Profundización en el tema

¿Cuándo surge? ¿Con qué finalidad?

Transcripción del video

El género picaresco se inicia a raíz de la muerte de Felipe Segundo. Alcanza su apogeo en el primer tercio del siglo xvii y cae en declive posteriormente, convirtiéndose en una simple novela de pasatiempo. Odias vertimiento para los incautos, escrita por unos autores convencidos de la inevitable decadencia de la nación española. La novela picaresca se puede interpretar como un cuadro de fondo costumbrista que muestra una parte importante de la sociedad del momento, aunque retrata con cierta delectación un personaje de corte ladrón y chulesco extraído de la más cotidiana realidad. No puede atribuirse la condición de pícaro a todo ciudadano de la época que lucha denodadamente por su supervivencia. Se ha definido psicológicamente al pícaro como un tipo de persona descarada, traviesa, bufona y de no muy cristiano vivir. El pícaro es un desvergonzado trotamundos que hurta pero no roba. Nacido en los bajos fondos, dado al vagabundo y sin un oficio determinado, lleva a término pequeñas raterías mediante ingeniosas tretas. Ve la vida fríamente, sin romanticismos exaltados, y carece de ambición o codicia. Se vale de la astucia como arma defensiva y de su embrutecimiento como paliativo del dolor.

El pícaro es fundamentalmente escéptico y contempla la vida como una suma de experiencias. Las notas que más claramente definen al género son su carácter autobiográfico y la condición del protagonista de prestar servicio a muchos amos. Lo autobiográfico parece una forma obligada porque el autor permanece oculto detrás de su personaje, que habla en primera persona y que en su continuo vagar conoce, vive y narra diversas aventuras que no tienen entre sí más conexión que su protagonista, el pícaro. La ausencia de estabilidad vital del antihéroe puede prolongar hasta el infinito la sucesión de historias, lo que facilita múltiples continuaciones. La primera novela en orden cronológico del género es la vida del Lazarillo de Tormes y de sus fortunas y adversidades, que se publica de forma anónima en el año 1554 en Burgos, Alcalá de Henares, Medina del Campo y Amberes. Su condición de anónima ha suscitado un largo debate de la crítica literaria, tratando de encontrar las causas que justificaron la ocultación de la identidad de su autor. Se han sugerido el temor a la Santa Inquisición o un deseo de discreción para no perder el favor real por parte de algún noble.

Dada la carga mixta que la novela encierra. El Lazarillo fue prohibido cinco años después de su aparición. El relato recoge naturalmente, de manera autobiográfica, las andanzas de un muchacho listo pero carente de estudios, al que la pobreza obliga a ponerse al servicio de muchos amos y agudizar su ingenio para no morir de hambre. Se trata de una sátira sencilla, con un estilo popular, llano, conciso y carente de retóricos, ismos o extravagancias lingüísticas. Un año después, en 1555, se publica en Amberes 1/2 de ideología eras mixta, si cabe, aún más acentuada. Otras novelas picarescas de notable trascendencia serán el Guzmán de Alfarache, de Mateo Alemán y su segunda parte Atalaya de la vida humana, la vida del escudero Marcos de Obregón, filmada por Vicente Espinel. La historia de la vida del Buscón, llamado Don Pablos de Francisco de Quevedo. Obra cumbre del género sin olvidar al Diablo Cojuelo de Vélez, de que vara y la vida y obra de Esteban y yo González. Sin renunciar a ninguno de los elementos resaltados como básicos para el género, lo autobiográfico y el realismo descriptivo.

Se desarrollo también una novela picaresca, protagonista femenina que se singulariza no obstante, por algo fundamental. Sus heroínas no sirven a varios años. Son atractivas e inteligentes mozas que utilizan sus encantos y habilidades para embaucar a los incautos, tendiendo sobre ellos ingeniosas redes de tramas hábilmente urdidas. Constituyen, en general, narraciones amenas en las que el amor juega un escaso papel y sólo sirve para dar cobertura a las andanzas del personaje. La pícara Justina, posiblemente de Francisco López de Úbeda, médico de Toledo, la hija de La Celestina, de Alonso de Salas Barbadillo. O las astutas féminas creadas por Castillo Solórzano son un claro ejemplo de ello.


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¿Por qué surge la novela picaresca en España?

La aparición de este personaje está relacionada a un sector de la sociedad española del siglo XVI y XVII. El largo esfuerzo realizado por España para sostener las guerras en Europa y las conquistas en el Nuevo Mundo habían empezado a mostrar sus consecuencias: 

  • Soldados que volvían empobrecidos o con problemas físicos graves.
  • Aventureros
  • Campesinos que abandonabas sus tierras

A estos hombres les resultaba muy difícil dedicarse a un trabajo diario y una vida ordenada.  Eran más propensos a holgazanear; sentían un menosprecio hacia los trabajos manuales que habían realizado los judíos y moriscos durante siglos.

Acostumbrados a las aventuras y peligros por tierras nuevas, la pequeña tarea diaria del buscarse comida no les resultada preocupante. Por lo tanto, no tenían bienes ni comodidades y esto les permitía desplazarse con facilidad de un lado a otro. 

Otros aspectos de la novela picaresca:

  • Carácter autobiográfico: las hazañas del pícaro parecen narradas por él, pues el relato es en primera persona. Sin embargo, quien escribe la novela es un autor culto, que utiliza al pícaro para realizar críticas o disertaciones morales, económicas, etc. El objetivo de esta técnica es hacerle creer al lector que la historia es real. 
  • Carácter retrospectivo: el pícaro cuenta sus andanzas muchos años después de haber sucedido; y lo hace con un tono desengañado debido a las experiencias que vivió. 
  • El pícaro busca mejorar su situación. No obstante, el medio no le permite. Siempre será un pícaro y está situación le permite al relato tener una infinidad de historias con la misma estructura, sin evolución. 
  • Tiene una intención doctrinal o moralizadora: se presenta la conducta del pícaro como aberrante, que es castigada para servir de ejemplo. Además, se muestra a la sociedad desde una postura crítica, exponiendo sus fallas. Esto le brinda un carácter realista a la novela, pues describe a la realidad sin ningún artificio o mirada idealista. 

Fuentes:

Creado con eXeLearning (Ventana nueva)