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¿Por qué debes cuidarlo?

¿Por qué cuidar el corazón?

Cuidar la piel, el cabello y la figura siempre ha sido un asunto importante para muchas personas, sin embargo, muchas veces suele descuidarse este órgano vital para el bienestar interior, el corazón.

Muchos no piensan que algo malo pueda estar pasando con este propagador de vida o no toman medidas para mantenerlo en buen estado, sin embargo, cualquiera podría padecer enfermedades cardiovasculares, quizá sin notarlo. 

La obesidad, el sedentarismo, los malos hábitos alimenticios y, en algunos casos, una enfermedad genética, son algunos de los factores de riesgo. 

Pese a que la falta de ejercicio o la mala alimentación son malos indicadores, también se pueden presentar problemas cardiovasculares en personas con hábitos saludables.

"Fui gimnasta gran parte de mi vida, comía frutas y verduras, pero hace algunos años cuando caminaba empecé a sentir cansancio y mareos. Era algo raro. Entonces consulte al médico y encontraron que tenía arritmias en el corazón", expresa Marina Guevara, una deportista y madre de familia que gracias a una consulta oportuna pudo evitar un infarto.

Expertos indican que en la mayoría de casos las personas no son conscientes de que una de las principales causas de muerte en el mundo son las enfermedades del corazón. Se atribuyen los síntomas a otros factores y por ello las consultas médicas son tardías. Por eso es importante tener presentes los signos de alarma.

Las afecciones cardiovasculares son problemas que, no obstante, se pueden evitar. Si existe un compromiso con llevar una vida saludable que incluya, por ejemplo, el aumento del consumo de frutas y verduras, se disminuirá el riesgo de diabetes o el colesterol alto, factores que pueden desencadenar en fallas cardiacas. También el ejercicio es fundamental, sus múltiples beneficios cardiovasculares mejoran la presión arterial, los niveles de azúcar, la capacidad física y la disminución de peso. En síntesis, cuidar el corazón y evitar enfermedades está, en gran medida, en nuestras manos.

Consejos 

  1. Ejercicio 3 o 4 veces por semana con intensidad moderada, durante 40 minutos cada sesión.
  2. Alimentación rica en frutas, verduras, granos, frutos secos y pescado. 
  3. Disminuir los dulces, bebidas azucaradas y grasas saturadas.
  4. No fumar.
  5. Si va a consumir algo de licor, idealmente vino y no más de dos copas.
  6. Bajar de peso y tener un índice de masa corporal menor de 25 Kg/m2.
  7. Disminuir la ingesta de sal
  8. Consultar al médico, incluso antes de tener cualquier síntoma para la evaluar la presencia o no de factores de riesgo cardiovascular.