Coloca unas 20 gotas de agua en una rebanada de pan. Guárdala en una bolsa y colócala en un lugar oscuro y cálido por lo menos durante una semana. Registra los cambios que observas en el pan en el correr de los días. Observa, si lo necesitas, usando lupa y microscopio.
¿Por qué crees que es mejor agregar agua al pan para que se desarrollen seres vivos?