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Durante

 

Los artiguistas llegaron a conformar un ejército de 1.000 hombres, en tanto que las milicias de Posadas estaban constituidas por 1.230 personas.

Los soldados españoles eran profesionales y disponían de artillería y de los fusiles más modernos de la época.

La milicia artiguista estaba formada en su mayoría por hombres de campo y desertores de las filas españolas.

 

Los revolucionarios contaban con un armamento totalmente improvisado, con algunas armas de fuego rudimentarias, pero sobre todo con cuchillos, lanzas construidas con hojas de tijeras de esquilar atadas a cañas tacuaras o ramas de árboles que empleaban como “picanas” para dirigir el ganado, y otros utensilios propios de las tareas ganaderas, como las conocidas boleadoras.

 El desarrollo de la Batalla