Las escenas que pintaban estos hombres tenían que ver muchas veces con la caza de animales, por eso son muy característicos la representación de Bisontes, Caballos, Mamut, Ciervos, entre otros. Estas representaciones eran acompañadas por dibujos de personajes junto a un arco y una flecha o lanzas, incluso a veces los animales eran alcanzados por estas armas de caza.
Se cree que este tipo de representaciones se vinculan a creencias mágicas que los hombres de la Prehistoria tenían con respecto a la pintura. Ellos pensaban que si pintaban un animal atravesado por una lanza, al salir de caza podrían lograr cazarlos y obtener alimento.