Las 3R del reciclaje son principios fundamentales para reducir el impacto ambiental de los residuos y fomentar prácticas sostenibles.

Estas son:

• Reducir
• Reutilizar
• Reciclar

Conozcámoslas… 

Refiere a
minimizar la cantidad de residuos que generamos al consumir solo lo necesario. 

¿Cómo lo aplicas? 

• Compra consciente:
  • Antes de comprar algo, pregúntate si realmente lo necesitas.
  • Opta por productos de larga duración en lugar de aquellos desechables.
• Evita los plásticos de un solo uso:
  • Di no a las bolsas plásticas, a los cubiertos y pajillas desechables.
  • ¡Lleva contigo una bolsa reutilizable o una botella de agua!
• Digitaliza:
  • Menos papel significa menos residuos.
  • Digitaliza documentos, facturas y apuntes.

Hace referencia a
darle una segunda vida a los objetos antes de desecharlos, encontrando nuevas formas de utilizarlos.

¿Cómo lo aplicas? 

• Extender la vida útil:
  • Reparar en lugar de tirar y reutilizar en bases, son formas sencillas de alargar la vida útil de lo que ya tienes.
• Mercados de segunda mano:
  • Es una forma de reciclar y dar una nueva vida a productos que aún tienen mucho que ofrecer.
  • Comprar y vender dichos artículos ayuda a reducir el desperdicio y fomenta un consumo más sostenible.
• Reutilización creativa:
  • Tomar ropa vieja, muebles desgastados o incluso envases de vidrio, y conviértelos en algo artístico.

Refiere a
procesar los materiales para convertirlos en nuevos productos, evitando el uso de nuevos recursos naturales.

¿Cómo lo aplicas? 

• Última opción: 
  • ¡El reciclaje es genial, pero no es la primera opción!
  • Solo deberíamos reciclar cuando ya no podemos reducir o reutilizar.
  • Reciclar usa energía y agua, y no es 100% eficiente. 
• Separación correcta:
  • Un buen reciclaje comienza con una buena separación.
  • Es importante saber como separar los materiales, si mezclas plásticas, vidrios o papeles ¡Todo el proceso puede fallar!
• Economía circular:
  • Cuando reciclamos bien, contribuimos a la economía circular.
  • Así, los materiales que usamos vuelven al ciclo productivo una vez más, sin necesidad de extraer más recursos del planeta.