La campaña oriental
A partir del primer reparto de tierras por parte del Capitán Pedro Millán, las primeras "suertes de estancia" fueron entregadas a las familias recién llegadas a Montevideo. A partir de allí, comienza un proceso económico y de asentamiento de familias en las afueras de la ciudad. A estos primeros vecinos se le sumarán aquellos que, sin tanta suerte, debieron asentarse en las afueras de la ciudad amurallada.
Este sistema de repartición de estancias y cabezas de ganado a las familias más influyentes devino en que la ganadería pasó a ser la actividad económica por excelencia en la campaña. De esta actividad se obtenía principalmente el cuero, pero también el sebo y la grasa.
Las estancias pasarán a ser, al decir de Reyes Abadie, "un centro económico social de vida autárquica, donde se ofrecía una posibilidad de trabajo; un lugar de refugio en un medio inseguro, donde se guardan armas y puede organizarse una hueste para la guerra, un núcleo generador de relaciones humanas...".
La campaña oriental quedará así conformada por una minoría de criollos y un gran número de indígenas, mulatos y mestizos que darán origen a una nueva forma de vida: "el gaucho".
Condición de las personas, lugares, sociedades, sistemas industriales o naciones que luchan por su autoabastecimiento e independencia.