Los Humedales son ambientes donde el agua puede presentarse de forma permanente o impermanente como inundaciones estacionales o periódicas. Debido a esta característica, se puede decir que predomina la vegetación hidrófila, la cual está estrechamente relacionada con el medio acuático o a suelos permanentemente saturados de agua.
En este ecosistema también podemos encontrar diversidad de aves. Muchas de estas aves presentan adaptaciones a la vida en el humedal. Por ejemplo: el tipo pico, el cual se relaciona con su alimentación y su hábitat, al igual que el tipo de patas.
En general, se reconocen cinco tipos de humedales principales, algunos de agua salada o salobre, y otros de agua dulce:
- Marinos (son humedales costeros, que incluyen lagunas costeras, costas rocosas y arrecifes de coral). Por ejemplo en nuestro país podemos encontrar la Laguna de Rocha, entre otras.
- Estuarinos (incluidos deltas, marismas de marea y manglares).
- Lacustres (humedales asociados con lagos)
- Ribereños (humedales adyacentes a ríos y arroyos)
- Palustres (es decir, “pantanosos” – marismas, pantanos y ciénagas).
Además, también existen humedales artificiales, los cuales son zonas construidas por el hombre, de forma controlada con un fin específico.