Sobre Artigas
Nació en Montevideo el 19 de junio de 1764.
Vivió los primeros años en la ciudad y fue a la escuela de los curas Franciscanos.
De niño pasó mucho tiempo en el campo de su familia, en la zona donde hoy es Sauce en el departamento de Canelones. Allí convivió con los indígenas de la zona y aprendió las tareas del campo.
A los 33 años se enroló en el Cuerpo de Blandengues y 14 años después fue designado Jefe de la Revolución Oriental.
En 1820 se retiró a vivir en el Paraguay donde murió a los 86 años de edad.
Te propongo ver este video para saber más:
Transcripción del video
Cuando José Artigas era chico. Mucho antes de luchar por la independencia de Argentina y Uruguay. Sus papás olvidaron anotar el sitio donde había nacido y su familia no sabía si era de Saúces solo o de las piedras, así que decidieron bautizarlo en Montevideo y decir que era de allí. De pequeño, todos lo llamaban José Gervasio, que era su nombre completo, pero a él no le gustaba para nada.
José Gervasio, a tener la cama. José Gervasio, come más despacio. Gervasio, Gervasio, Gervasio.
Como era el tercero de seis hijos y sus hermanos se burlaban de su nombre, José prefería estar en la hacienda con su abuelo, que era muy sabio y muy bueno. Y nunca le decía Gervasio. Así, mucho antes de luchar por la independencia de Argentina y Uruguay.
En la hacienda del abuelo, cuando apenas tenía cinco años, el pequeño Artigas hizo muchos amigos guaraníes con quienes aprendió secretos que sus hermanos no sabían, como pintarse para cazar, usar el arco y la flecha y hablar el guaraní, una lengua que ni el abuelo ni sus hermanos entendían bien. Mamá, Gervasio está hablando raro.
Gervasio no sabe hablar. Gervasio, Gervasio, Gervasio.
A José no le importaba lo que dijeran los demás, porque al hablar en guaraní podía aprender muchas cosas de sus nuevos amigos, que además no le decían Gervasio. Hasta que un día, mucho antes de luchar por la independencia de Argentina y Uruguay, cuando José cumplió siete años, sus papás lo mandaron al colegio de sus hermanos, donde sus amigos indígenas no podían entrar y por eso José se puso muy triste. Gervasio. ¡Gervasio!
¡Gervasio! ¡Gervasio! ¡Gervasio! ¡Gervasio!
José no entendía por qué los niños guaraníes no iban al colegio como él y se escapó a la hacienda. Tenía que preguntarle al abuelo por qué tenía que estudiar español y religión en lugar de seguir pintándose para cazar y usando el arco y la flecha. Entonces, el abuelo, que era muy sabio, le contó que en su época de aventurero nunca tuvo amigos guaraníes porque no entendía su lengua. Le dijo que si los hubiera entendido, habría podido compartir con ellos todo lo que él había aprendido en el colegio. Entonces, mucho antes de luchar por la independencia de Argentina y Uruguay, el pequeño José decidió volver al colegio para enseñarle guaraní a sus compañeros y español a sus amigos guaraníes. Así, cuando José cumplió 10 años, se convirtió en el único niño que tenía amigos que hablaban español y amigos que hablaba guaraní. Sus hermanos aprendieron a pintarse para cazar y nunca más lo llamaron José Gervasio. Simplemente le decían Artigas, como a él le gustaba que lo llamaran. Todo esto le ocurrió al niño José Gervasio Artigas, que tiempo después lucharía por la independencia de Argentina y Uruguay. Porque antes de ser grande, José Artigas también fue chico.
Bienvenidos a.
Quiero mi monumento, el primer programa en el que los invitados juegan para tener su propia estatua. En esta ocasión, los invitados son José Rondó, militar y político rioplatense, y José Gervasio Ortigas, jefe de los Orientales y protector de los pueblos libres. Les haré una pregunta y nuestra distinguida tribuna decidirá cuál de los dos ha respondido correctamente. ¿Están listos? ¿Cuál es la forma de gobierno que deberían adoptar las provincias unidas del Río de.
La Plata? Quiero mi monumento. Lo que yo quiero para nuestra querida banda oriental, así como para las demás provincias unidas del Río de la Plata, es que seamos libres de España y que nos organicemos en un gobierno federal.
¿un gobierno federal? ¿Estás seguro, Artigas? Le presento una idea mejor. Tener un centro que tome decisiones en nombre de las demás provincias. Ese centro debería ser a A ver, a ver.
Sí, Buenos Aires. Buenos Aires. De ninguna manera. Debemos organizarnos como un gobierno federal. Disculpe, Artigas.
¿qué es un gobierno federal?
Es un gobierno donde cada provincia tiene autonomía y elige a sus propias autoridades. Así, las funciones del gobierno están repartidas.
Sí, repartamos todas las funciones del gobierno dentro de Buenos Aires.
Basta ya de tanto centralismo y de que Buenos Aires nos diga qué podemos o no podemos hacer. Que el Estado Nacional sea el que intervenga en los temas que afectan al conjunto de las provincias y el que asegure la soberanía.
Veamos qué dice la tribuna. La respuesta.
Es correcta. ¡Vamos arriba!
Y el monumento de hoy es para José Gervás y Artigas. Los esperamos. En nuestro próximo programa, mi coronel, traigo dos cartas desde Buenos Aires.
Estimado jefe de los orientales, tengo una buena y.
Una mala noticia.
La buena.
Es que.
Terminó el.
Armisticio.
Con España. Y la mala.
Para.
Usted es.
Que a.
Partir de ahora yo me haré.
Cargo del Ejército Oriental. Si no.
Hace.
Caso, lo acuso de traidor a la patria.
Cordealmente, Manuel de Zarratea, ex integrante del primer triunbirato.
No voy a ceder. Seguiré fiel junto a mi pueblo. A ver, ¿qué dice la otra carta?
Estimadísimo líder de la banda oriental, no le haga caso a mi colega Zarratea. Ahora su cargo lo ocupo yo y quiero que vuelva para que juntos liberemos a Montevideo del dominio realista. Posdata. El segundo triunvirato invita a usted y a sus representantes a la Asamblea General Constituyente y Soberana a celebrarse en el año 1813.
Otra buena noticia. La asamblea es la oportunidad para que todas las provincias encontremos una identidad compartida. Vamos, Amba. Regresamos a Montevideo. ¡Lujo! ¡A la carga, mis valientes! Mientras nosotros liberamos a Montevideo, nuestros diputados llevarán la propuesta de federalismo a la asamblea.
Bueno, en realidad tuvimos que cambiar a sus diputados por otros porque estaban.
Más cerca. ¡Mentira! Los cambiaron porque no quieren aceptar nuestras propuestas. Quieren que Buenos Aires nos domine a todos sin derecho a elegir.
Juro que no es mi culpa! Me obligaron a hacerlo las autoridades de la asamblea.
Esa asamblea es una farsa. ¡Que no se diga más.
Retrocedemos. Rondó. Por mal mentiroso, se va a liderar ahora el ejército del norte.
¿y usted.
Quién es? Soy el director supremo que reemplaza al segundo triunvirato.
¡Director supremo! ¡Siguen y siguen cambiando de forma de gobierno!
Decreto que usted, José Gervasio Artigas, está fuera de la ley y es un traidor a la patria.
Y, ¿sabe qué?
Le daré 6000 pesos al que lo tome prisionero.
Esto es el gulmo! Nos vemos en el campo de batalla.
Amiguese con las provincias unidas, Artigas, por favor.
Por favor, por favor. No, niño, por ahora no. Hay que ser fiel a lo que uno cree y yo creo en una unión de pueblos libres. ¡Unión de pueblos libres! ¡Eso es! ¿Quién está conmigo? ¿Quién quiere ser libre de España y de la autoridad centralista del directorio? ¡Yo! ¡Vamos! Entre Ríos libre.
Misiones libre. Orientes libre. Banda Oriental libre.
Eso es trampa. ¿Y usted quién es? Soy el nuevo director supremo y le ofrezco una tregua. Le doy la independencia de.
La.
Provincia oriental y usted deja de independizar a otras provincias.
¡no! No queremos formar otro país. Queremos que todos formemos un solo país libre y federal. ¡Nada más! ¿Sí? Hasta feliz. ¡Apurdo va libre!
¡Basta! ¡Me rindo!
Como primera medida de esta liga de Pueblos Libres, llamo a todos sus integrantes a un congreso. ¿Estamos todos? ¡Presente! ¡Presente! Queridos compañeros de esta liga de Pueblos Libres, les doy la bienvenida y les presento nuestra nueva bandera. Es como.
La que creo Belgrano, pero con franjas rojas.
Sí, Zamba, porque el rojo es el color del federalismo y lo puse ahí porque sé que algún día todos seremos parte de un único país donde elijamos vivir juntos sin imponernos nada. ¿Y qué Vamos a hacer con España?
Ni España ni Portugal. Como protector de esta liga, nos declaro libres de todo poder extranjero. Y con la tierra que recuperemos.
¿qué pasará?
La tierra será para el que la trabaje, porque creo que los más infelices deben ser los más privilegiados. Artigas, pronto se van a reunir las provincias.
Unidas en Tucumán, en un congreso donde van a declarar la independencia. ¿No cree que habría que hacer las paces con ellos y sumarse?
Algún día será así, niña. Pero por el momento no confío en las provincias unidas y estos son mis motivos.
Yo, José Gervas y Ortigas, con las provincias unidas, no me junto y por eso arme en mi liga. La unión de los pueblos libres, negro, gaucho y aborigen, con derecho a no hacer caso a lo que dicen.
Desconfíamos del congreso que está lleno de porteños, no quieren federalismo.
Nada de eso.
Aquí nadie es más que nadie y bailamos el mismo baile en provincias y también en Buenos Aires. Queremos la independencia. Ser libres no es una ciencia, es respeto por el otro y sus creencias. Y si un día nos juntamos porteños y provincialos, en unión y libertad, seguro vamos. Aquí nadie es más que nadie y bailamos al mismo baile en provincia, así también en.
Buenos Aires.
Y ahora, mis colegas, vamos a brindar por esta unión con unos mates.
Señor, traigo novedades.
No interrumpa, que estamos por celebrar.
Pero vienen los portugueses.
¿qué? ¿Los portugueses?
Sí, señor, nos invaden.
¿pero cómo? ¿No se habían calmado ya los portugueses con el armisticio?
Armisticio.
Zamba. Verá, Zamba, nosotros estamos aquí, entre Brasil y las provincias unidas. Los portugueses, con el apoyo de los españoles y porteños, vuelven a nuestra tierra para invadirnos. Pero les vamos a dar pelea. A la carga, mis valientes. No, Zamba, esta vez no pueden acompañarme. Es una situación muy peligrosa, niños. Ahora debo partir, pero nunca se olviden. Lo único que importa es ser libre y.
Ser feliz. ¡Seamos libres! ¡Que la demás no importa nada. ¿Y cómo sigue la historia Joaquín Lencina?
No tan bien, Samba. Artigas peleó valientemente contra los portugueses, pero fue derrotado. Y pasó sus últimos años en el Paraguay, donde lo llamaban Karai Guazú. ¿Karai qué? Quiere decir gran señor. Pero mejor contame qué has aprendido hoy. Hoy aprendí que.
Artigas se crió en el campo, que era soldado de profesión y que peleó por liberar a Montevideo.
¿liberarlo De quién? De los realistas que se habían mudado a la banda oriental después de la Revolución de Mayo y de los portugueses que atacaban por el norte desde Brasil.
Muy bien. ¿Y qué pasó con.
Buenos Aires? Pasó que en Buenos Aires estaban los centralistas, que estaban dispuestos a pactar con quien sea con tal de salirse con la suya.
Así es, Ambas. Nuestro general, en cambio, era federal. Estaba a favor de que todas las provincias unidas convivieran bajo un mismo país, pero manteniendo su propia identidad.
Pero Artega se mantuvo firme con sus ideas.
Claro que sí. Primero organizó el éxodo oriental, que sirvió para unir a su pueblo en una misma causa.
Y después trató de impulsar el federalismo en la Asamblea del Año 13, donde además reclamaba la independencia de España.
También en ese momento le dieron la espalda a Zamba, pero nuestro general respondió creando la liga de los pueblos libres.
Sí, y repartió la tierra entre la gente del pueblo, impulsando la libertad y la prosperidad entre todos.
Y gracias a sus ideas y su ejemplo, hoy existe un país libre llamado Uruguay, que jamás va a olvidar a Artigas, porque a él le debe su libertad, Zamba. ¡Yujú! Viva la libertad!
¡viva! ¡viva! el.