Cuando el acoso se produce, la víctima experimenta una sensación de constante ataque que trasciende incluso los límites de su hogar, generando una sensación de atrapamiento.

Las consecuencias de este tipo de acoso pueden perdurar en el tiempo y afectar a la víctima de las siguientes maneras:

+ Impacto Mental

La víctima experimenta preocupación, vergüenza, sensación de estupidez, miedo o ira.

+ Impacto Emocional

Siente vergüenza y pierde interés en actividades que solían gustarle.

+ Impacto Físico

Experimenta fatiga, problemas para dormir, dolores de estómago y de cabeza.

Sentirse objeto de burlas o acoso puede dificultar que la víctima busque ayuda o trate de resolver la situación por sí misma.

En casos extremos, el ciberacoso puede conducir al suicidio.

A pesar de sus múltiples formas de afectación, el ciberacoso no es invencible. Es posible superarlo y recuperar la confianza en uno mismo y la salud.