Textos, fotos, videos, música; componen un volumen de información muy grande que intercambiamos permanentemente. Para su almacenamiento de transmisión se requiere traducirlos a bits en un
proceso denominado técnicamente “codificación”.
La calidad y volumen de la información generada, son proporcionales a la cantidad de bits que se utilizan para representarla.
Existen procesos llamados de compresión que aportan eficiencia, disminuyendo el número de bits requeridos. Se realizan mediante
algoritmos que reducen el tamaño original de los datos, ya sea sin alterar su contenido, compresión sin pérdidas; o modificándolo de manera que no sea perceptible para el usuario a través de la eliminación de información no relevante, compresión con pérdidas.
La música en formato mp3, las imágenes en jpg y la información en formato zip son ejemplos de archivos comprimidos mediante estos procesos.
Este procedimiento es imprescindible en aplicaciones satelitales científicas en las cuales, la capacidad de transmisión desde el satélite hacia la tierra es muy pequeña, y el objetivo está vinculado a la obtención de imágenes de alta calidad.
El algoritmo de compresión llamado locoy por sus siglas en inglés para compresión de baja complejidad, fue desarrollado por un grupo de investigadores uruguayos. Es base del estándar internacional jpg ls y es utilizado por la nasa para la transmisión de imágenes en sus misiones. En su política de contribución a la investigación científica y la innovación tecnológica, Antel está desarrollando junto a la facultad de ingeniería el primer satélite uruguayo denominado Antel-sat. El mismo utilizará este algoritmo para el envío de las imágenes de nuestro territorio que se tomarán desde el espacio, las que proveerán información sobre nuestra geografía y las condiciones de nuestro suelo para diversos fines.