Busca en casa cualquier raqueta de juguete que tengas y una pelota pequeña que rebote.
Practica golpeando la pelota contra la pared, dejando que pique una vez y así familiarizarte con los movimientos básicos.
Cuando creas que ya practicaste lo suficiente, invita a un amigo o amiga para practicar y jugar.
Puedes usar una cuerda como red improvisada y jugar en el patio de tu casa o en cualquier espacio libre que sea seguro y adecuado para no causar inconvenientes.
¡Diviértete mientras aprendes!
¡Vamos!