Los esclavos adoptaron infinidad de formas de resistencia como contrapartida al dominio de los amos: los gritos, la lucha, la huída, el trabajo realizado en más tiempo que el exigido, el robo de propiedades, los sabotajes, las huelgas de brazos caídos, el asesinato de capataces y amos, la quema de los edificios de las haciendas, las sublevaciones, las rebeliones, etcétera.
África resiste