Lo masculino y lo femenino son enseñados y aprendidos por las personas.
Nos construyen y nos vamos construyendo, así como construimos a los demás con las miradas que les damos, miradas que habilitan o desaprueban. Una mirada de equidad de género lleva a la igualdad y justicia, una mirada que desaprueba o de desprecio genera graves problemas en los demás. Lo importante aquí es que debe primar el respeto por el ser humano, por el ser.
El entender que el género es construido por una sociedad de un momento determinado ayudará a entender que el presente de esta sociedad uruguaya es muy diferente de la sociedad uruguaya de hace 200 años y no podemos juzgar a la Historia
Hoy se apuesta a una tarea de construcción de equidad de género, donde se educa para que nadie tenga más poder sobre otro, donde el ser persona prima sobre lo demás.