Ellos son animales de sangre caliente. Esto quiere decir que la temperatura es importante para ellos.
Viven en cuevas para protegerse del peligro, para ahorrar energía y para alimentarse.
Utilizan las cuevas para dormir durante el día porque no les molesta la luz y para invernar durante el invierno porque mantiene una temperatura fresca.
Los murciélagos permiten que su temperatura corporal baje mientras están durmiendo y disminuyen la actividad física para conservan energía. Pueden pasar meses colgados sin utilizar energía.