Vocación en Rodó
VOCACIÓN
(Capítulos LXXIX y LXXX)
Vocación y aptitud
- Fragmento -
La aptitud, en lo que tiene de virtual y primitivo, es secreto de la Naturaleza. […] La vocación es el sentimiento íntimo de una aptitud; la vocación es el aviso por que la aptitud se reconoce a sí propia y busca instintivamente sus medios de desenvolvimiento.
Pero no siempre vocación y aptitud van de la mano. En aquellas mismas ocasiones en que las enlaza un solo objeto, no siempre guardan justa correspondencia y proporción.
Y si no cabe producir artificiosamente la aptitud superior allí donde por naturaleza no existe, cabe despertarla cuando ella no es consciente de sí; cabe formarla donde permanece incierta y desorganizada; cabe robustecerla, mediante la doctrina, la educación y la costumbre; cabe dotarla de la energía de voluntad con que venza los obstáculos del mundo; cabe sustituirla, si acaso pierde su virtud, removiendo el fondo obscuro del alma, donde duermen tal vez disposiciones y gérmenes latentes; cabe dilatarla, por este mismo hallazgo de nuevas aptitudes, aun cuando la primera persista y prevalezca entre las otras; cabe en fin, suscitar amor por ella, cuando en el alma donde habita la esterilicen indiferencia o desvío, y disuadir el amor vano, y desarraigar la falsa vocación, allí donde la aptitud no sea más que sombra ilusoria.
José Enrique Rodó, "Vocación", en Motivos de proteo, Valencia: Cervantes, 1917.
Presentación actualizada.