Hemos llegado al final de nuestro recorrido.
Vimos conceptos referidos al valor numérico de una expresión algebraica, un caso particular de expresiones a las que se les llama monomios, trabajamos con sus partes y analizamos cuándo son semejantes.
Nos quedan otros temas para trabajar a partir de esta introducción, pero ya tenemos las bases para continuar.
A modo de cierre, pero dejando trazado el camino para un nuevo recorrido, te dejamos este video:
Transcripción del audio del video
¿Qué es el álgebra?
Sabemos que en la vida cotidiana necesitamos de las matemáticas, por lo que hemos aprendido a realizar ciertas operaciones tales como sumas, restas, multiplicaciones y divisiones.
Podemos contar objetos, personas, mascotas y otros.
Más ahora entonces en el álgebra hacemos lo mismo, pero con valores que no conocemos.
Para esos valores que no conocemos asignamos una letra, y eso es el álgebra.
Representamos por letras valores que aún no conocemos y hacemos con ello las mismas operaciones de ciertas.
Un ejemplo de la aplicación del álgebra es el hacer el cálculo del área de un rectángulo.
La fórmula del área de un rectángulo es base por altura y lo representamos con las letras a para el área, d para la base y h para la altura.
Entonces de manera general estamos representando la operación necesaria para su cálculo, aún cuando de momento no conocemos todos los valores.
Por tanto utilizamos álgebra para representar la base con la letra b, la altura con la letra h y el área con la letra a.
Así podemos ver que antes de conocer incluso la palabra álgebra, ya utilizamos álgebra en fórmulas que hemos aprendido desde nuestros inicios en las materiales.