Vivir con diabetes. Testimonio de un joven...
(imagen tomada por la Profesora Fabiana Méndez)
Recuerdos de una crisis, el diagnóstico y los aprendizajes posteriores
"Como pude me bajé y caminé hasta el centro de estudios allí comuniqué que me sentía muy mal a mi profesor y este enseguida se contactó con enfermería y me atendieron.
Me hicieron un testeo de glucemia y dio 5,28. Enseguida me subieron a una ambulancia y me llevaron a un centro de salud, a partir de ese momento comenzó mi camino con mi nueva compañera: la diabetes.
Siempre fui de hacer mucho deporte y eso me juega a mi favor, pero respecto a la alimentación fue y es aún todo un desafío.
Aprendí a inyectarme insulina, a controlarme diariamente 4 veces al día pinchándome las yemas de los dedos hasta que comencé a utilizar los sensores para control y eso me cambio la vida.
Hoy en día a un año y medio de tener la enfermedad, como de forma debida) aunque algunas veces me hago un permitido) entreno mucho más que antes, trabajo en dos gimnasio y hago las clases junto con mis alumnos eso me permite tener los niveles de glucosa regulados.
En un principio me enojé mucho, me puse rebelde no aceptaba que me estaba pasando esto, ahora convivo con ella y me amigué, nos estamos conociendo ya que es muy silenciosa y se expresa de forma tímida pero mi cuerpo reconoce su presencia y como debo actuar frente a los cambios que me impone.
No es el fin del mundo, no es una limitante para ir a surfear, jugar al futbol, salir con amigos o ir de viaje. Siempre estoy atento y si voy a comer con mis amigos tomo las precauciones necesarias para pasar bien y no descompensarme.
Aprendí a aceptar que soy diabético hoy y siempre, pero que no es una causa para no poder tener una completa y feliz."