El término ciberacoso, también conocido como ciberbullying, es una extensión del acoso en los medios tecnológicos, por teléfono o por Internet, por el cual una persona (acosador o acosadora) trata de minar y socavar la autoestima de otra persona, enviándole mensajes amenazantes, intimidatorios o chantajistas a través de servicios de email o mensajería instantánea (tipo chat o Messenger), SMS o las redes sociales.
Moisés de la Serna, 2017.
La falsa creencia de que es una broma sin importancia. El ciberacoso puede tener repercusiones muy serias.
El deseo de venganza ante un conflicto previo, o por la enemistad entre dos personas. La falta de habilidades sociales hace que no sepan gestionar adecuadamente la situación, no pasen página y busquen dañar a la otra persona.
La falta de autoestima de la persona acosadora, quien trata de ocultarlo mostrando su fuerza para humillar a otras personas y parecer superior. La presión del grupo de iguales y el interés por proteger o mejorar su estatus social.
En cada situación de ciberbullying, ciberacoso, hay diferentes participantes.
Roll de agresor A.
Puede buscar visibilidad y llamar la atención mediante sus actos. Puede ser que se sienta poderoso o superior en esa situación y puede pensar que la violencia es una manera de resolver problemas o conseguir aceptación.
Roll de acosado U.A.
Puede tener sentimientos duraderos de vergüenza y baja autoestima. Puede querer evitar el encuentro con los demás, disminuir su rendimiento escolar o sentirse mal físicamente. Esto, a su vez, profundiza el sentimiento de impotencia frente a lo que le sucede.
Roll de espectador A.
El ciberbullying implica la construcción de una escena que busca visibilidad y atención de otros. Por eso, quienes son espectadores, has, resultan una pieza clave. Si bien pueden tener dificultad para accionar, por temor a ser agredidos o a perder su estatus dentro del grupo, son, a la vez, quienes pueden encontrar un cierre para la situación. La intimidación acaba cuando quienes observan se vuelven activos has, expresan su empatía e intervienen desde la cooperación y la solidaridad.
Personas adultas.
Su rol es esencial para acompañar. El ciberbullying no es un problema de un grupo o de niños y niñas en particular, sino un problema social que las personas adultas e instituciones alientan o desalientan y en cuya resolución deben involucrarse.
Fuente.
Guía de sensibilización sobre convivencia digital. UNICEF 2020. Extraído de ANEP, Plan Seival. Ciudadanía digital. Cuadernillo de recursos para el aula. Una convivencia en espacios digitales. Ciberbullying.
. Roles en el ciberbullying (CC0)
Ciberbullying de Emanuel Finozzi
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