La radiación es de origen natural o artificial.
Nuestra especie ha evolucionado en un ambiente naturalmente radiactivo.
Nuestro planeta está siendo bombardeado constantemente por partículas provenientes del espacio que reciben el nombre de rayos cósmicos y que consisten principalmente en protones, núcleos pesados, partículas Alfa y Beta y radiación Gamma.
La radiación artificial es aquella producida por el hombre en diversas actividades teniendo una infinidad de usos para la sociedad: conservar alimentos, control de equipajes, determinación de la autenticidad y edad de obras de arte, detectores de humo, y hasta en la industria textil, entre otras muchas más.
Los usos relacionados con la medicina, ampliamente beneficiosos, son los que constituyen casi la totalidad de la radiación artificial.
Todos estamos expuestos, en promedio, a una dosis anual de radiación compuesta por un 86% de radiación natural y un 14% de radiación artificial