A pesar de la ocupación de Montevideo, las fuerzas orientales continuaron combatiendo hasta 1820. Derrotadas finalmente en la Batalla de Tacuarembó, el general portugués Lecor quedó como gobernador y capitán general de la Provincia Cisplatina.
La guerra contra las fuerzas portuguesas había dejado 4.000 orientales muertos, el 6 % de la población total.
Dentro de la Banda Oriental hubo enfrentamientos con respecto a este acontecimiento. Muchos opinaron que estaba bien pertenecer al Imperio luso-brasileño. Otros dijeron que la Banda Oriental debía ser lo que siempre fue, una provincia dentro de las Provincias Unidas del Río de la Plata.