Para Batlle, el Estado no solo tenía que intervenir en la economía, sino también en otros aspectos, como las relaciones laborales.
Grandes huelgas y movilizaciones obreras reclamaban, en esos años, mejores salarios y menos horas de trabajo.
→ La jornada laboral podía ser de 10, 12 o 14 horas.
→ Tampoco estaba limitado el trabajo de los menores.
Veamos qué decían los periódicos de la época:
Entonces, ¿qué es una huelga?