Guardianas del equilibrio
Cada 20 de mayo se celebra el Día Mundial de las Abejas, una fecha que busca recordarnos el rol fundamental que estos pequeños insectos tienen en la vida del planeta… y en la nuestra. Las abejas no solo producen miel: son las grandes responsables de la polinización de una enorme cantidad de plantas, incluyendo muchas frutas, verduras y cultivos que forman parte esencial de nuestra alimentación.
Gracias a su trabajo incansable, se mantiene la biodiversidad, se reproducen los ecosistemas y se asegura el equilibrio natural. Sin embargo, su existencia está en peligro. El uso de pesticidas, la destrucción de su hábitat, el cambio climático y la contaminación están reduciendo drásticamente las poblaciones de abejas en todo el mundo.
Esta efeméride, impulsada por la ONU y celebrada por primera vez en 2018, coincide con el nacimiento de Anton Janša, pionero en las técnicas modernas de apicultura. Pero más allá del homenaje, el día es una oportunidad para informarnos, actuar y crear conciencia sobre cómo nuestras decisiones pueden ayudar a protegerlas.
Desde plantar flores nativas en jardines y balcones, hasta evitar productos que dañan a los polinizadores, todos podemos hacer algo. Las abejas nos dan más de lo que imaginamos… y cuidarlas es también cuidar nuestra salud, nuestra comida y nuestro futuro.
